Cuando viajamos a otros países, a maridín y a mí una de las cosas que nos apasiona es la de probar la comida típica del lugar.
El problema viene con los peques ya que ellos son algo más reticentes a hacerlo pero al final, acaban picoteando y si les gusta, ya sabemos lo que van a comer esas vacaciones... Son así...
Normalmente, no nos hemos encontrado con la situación de que no les gustara nada y siempre hemos encontrado opciones alternativas... Quizá donde más sufrimos fue en Bali ya que la comida - casi toda - tenía un ligero toque picante... Aunque cuando la peque echó mano del pato y el mayor de los cangrejos y el cochinillo, se les quitaron todos los " males culinarios".
Este año, en Isla Mauricio, la verdad es que hemos disfrutado todos de su comida ya que tienen mucha influencia tanto india como francesa y a esta última tengo acostumbrados a los peques así que no ha habido problema y si vais, no creo que tengáis mucho problema porque cocinan de manera deliciosa.
Y con sus frutas hacen unos cócteles con y sin alcohol que te dejan en éxtasis como por ejemplo el " Mocktail", mezcla de zumos de frutas variadas que refresca y es sabroso.