Los gatos suelen ser animales que se estresan con mucha facilidad ( viajes, cambios de casa, reformas, nuevos miembros en la familia... ) y a veces no es fácil lidiar con ese estrés que tienen y si no se actúa pronto, la cosa puede complicarse hasta el punto de afectar seriamente a su salud.
Por supuesto que no soy ni veterinaria ni etóloga animal pero he tenido ya bastantes gatos como para saber que el estrés es muy peliagudo en estos animales y que hay que ayudarles desde el momento en el que vemos su situación.
Las señales de alarma están ahí y si tenéis un gato casero, será muy fácil que os deis cuenta de que algo no funciona...
Los signos más significativos son:
- Está mucho más inactivo de lo habitual.
- Rechaza los premios en galletitas o de comida enlatada.
- Se muestra irritable.
- No ha comido nada o muy poco.
- No hace ni pis ni caca en la bandeja ( y tampoco fuera ).
Si esto pasa, hay que manejar este estrés y facilitarle la vuelta a la normalidad por lo que yo, desde mi humilde posición de amante de los animales y mucho de los gatos, os doy 4 pautas a seguir.
1. Crearle una zona segura.
Cuando están estresados, los gatos no exploran como suelen hacer de forma normal sino que se refugian en una zona de la casa en la que se encuentran más seguros; normalmente habitaciones de invitados, armarios, etc.
Lo mejor es dejarle en esa zona y facilitarle un poco los días que pase allí hasta que se encuentre mejor y para ello tendremos que ponerle una bandeja de arena, comida y bebida y su cama. A poder ser, todo bastante espaciado para que se vaya moviendo.
2. Vigilar la alimentación.
Además de ponerle la comida que suele comer cada día, podemos ofrecerle latita de comida húmeda, que suele ser algo que les encanta. Es una manera de hacerles que coman así que un par de veces al día mínimo le ofreceremos.
Curiosamente, cuando los gatos se estresan, suelen dejar de comer por lo que hay que estar muy pendientes de esto ya que la no alimentación en el gato puede traer problemas muy graves de salud como por ejemplo la lipidosis hepática.
3. Contacto
Si tu gato no quiere " establecer" contacto contigo en estos momentos de estrés, no le fuerces porque se agobiará aún más.
La técnica que te recomiendo es ir entrando de vez en cuando en la habitación en la que esté y sentarte un rato en el suelo y ver y esperar su reacción. Si se acerca y se deja acariciar, perfecto, sino, no pasa nada, poquito a poco, necesita su tiempo.
4. Usar feromonas sintéticas.
Este recurso siempre lo he usado cuando ha llegado un gato nuevo a casa, porque me hace sentir más tranquila.
Las feromonas sintéticas se usan o bien en spray o bien en difusor, que es como yo las prefiero ya que es como un ambientador de los que se enchufan y las va dispersando por el ambiente. Funcionan muy bien y reducen la ansiedad y el estrés del gato y además no afectan de ninguna manera a humanos y/u otros animales.
Tener a nuestro gato tranquilo y sin estrés es verlo feliz, si notas que tiene ansiedad, no dudes en ayudarlo y si ves que no puedes, acude al veterinario, te dará pautas.
10 tips para mejorar el bienestar de tu gato ( clica aquí ).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si quieres dejarme tu opinión sobre este tema, estaré encantadísima de leerla y porfa, si te sale el cuadrito de verificación de palabras, házmelo saber, teóricamente está desactivado.
Gracias!