Los brioches Manala

Los brioches Manala (también llamados "mannala" o "mannele", según la región) son unos deliciosos panes dulces tradicionales de la región de Alsacia, en Francia, y de partes de Alemania y Suiza.

 Tienen una forma peculiar, ya que se moldean como pequeños hombres o figuras humanas, y están asociados con la festividad de San Nicolás, que se celebra el 6 de diciembre.

¿Qué son los Manala?

Son brioches esponjosos elaborados con ingredientes básicos como harina, leche, mantequilla, azúcar y levadura. Su textura es suave y su sabor dulce, a menudo perfumado con vainilla o agua de azahar. En ocasiones, los adornan con pasas, azúcar glas o pepitas de chocolate para simular ojos y detalles en la figura.

Se consumen tradicionalmente durante el Adviento y el Día de San Nicolás, acompañados de chocolate caliente, café o un vaso de leche.

Aunque se han hecho tan conocidos que se venden en panaderías y mercadillos de Navidad de las regiones antes comentadas durabte todo el mes de diciembre.

La leyenda detrás de los Manala

La forma de los Manala está inspirada en la figura de San Nicolás, el santo patrón de los niños. Según la leyenda, San Nicolás rescató a tres niños que habían sido secuestrados por un carnicero malvado y revivió a los pequeños después de que este intentara hacerles daño. En agradecimiento, los habitantes comenzaron a honrar a San Nicolás cada año regalando dulces y panes con forma de hombrecitos, simbolizando a los niños rescatados.

Por ello, los Manala no solo son un postre, sino también un símbolo de protección y bondad hacia los niños.

Esta tradición se mantiene viva en Alsacia, donde los Manala forman parte de los mercados navideños y las celebraciones familiares. Además, su forma simpática y su historia los han hecho populares en otras regiones. ¿Los has probado alguna vez ?.