Visitando Riquewihr, Alsacia

 Visitar Alsacia es visitar pueblecitos con encanto, decorados como si pertenecieran a un cuento de Navidad o a uno de los Hermanos Grimm. 

Hay dos pueblos que, además, nos transportan a una de las películas de dibujos animados ( y más tarde también en versión con actores reales ), La Bella y la Bestia: Eguisheim y Riquewihr.

Hoy vamos a hablar del segundo de ellos, pueblecito encantador que es de obligada visita; aunque no os voy a decir a qué hora es mejor porque tiene la zona tanta fama que está " a petar" vayáis a la hora a la que vayáis.  Aquí os dejo un vídeo para que lo veais 📺

Está situado en un valle, rodeado de las colinas de Los Vosgos, casi todas ellas con viñedos de Grands Crus ( parcela o finca donde se elaboran vinos excepcionales gracias a un excelente terroir  - terreno - y del buen hacer del viticultor ).

Os habréis dado cuenta de que su nombre es muy curioso, verdad? Pues os voy a decir de dónde viene... 
Parece ser que por allá el s. VIII, había un terrateniente llamado Richo que plantó viñedos en este lugar y les llamó " Richo villa "y esto acabó derivando en el nombre que tiene ahora: Riquewihr.

A partir de ahí, el vino siguió siendo una de las cosas que llevó al pueblecito a la prosperidad ya que con el paso de los años y posteriormente de los siglos, cada vez más gente se dedicó a la viticultura y a la venta y comercio de este vino por Europa, convirtiéndose en uno de los más buenos y reconocidos. 

Y antes de que pasemos a hablar de lo más importante que ver en este pueblecito de ensueño, os diré que está catalogado como uno de los " pueblos más bonitos de Francia ".

Visitarlo no lleva excesivo tiempo; nosotros fuimos a comer allí y pasamos media tarde y luego, fuimos  Eguisheim para acabar el día. Una idea de ruta es hacer por la mañana el Castillo de Haut - Koeninbourg y Ribeauvillé, luego ir a comer a Riquewihr y visitarlo y acabar el día haciendo Eguisheim y ya cenar allí o en vuestro " campo base alsaciano ". 

Qué podemos ver en Riquewihr?

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La zona a visitar de este pueblecito está dentro de las dos murallas y si bien hay muchos sitios en los que os dicen que sigáis una ruta específica, nuestra recomendación es que lleguéis al pueblo, aparquéis - hay varios parkings municipales que son de pago, algunos gratuitos ( cada vez menos ) pero si aparcáis en las callecitas de los viñedos, os saldrá gratis y son 5 minutos caminando hasta la entrada - y paseéis por el pueblo porque lo bonito de este roadtrip alsaciano es pasear por los pueblos y descubirlos, no ir siguiendo un mapa estricto... Pasea, descubre, cotillea los rincones, huele los aromas que desprenden las chimeneas...

Eso sí, hay algunas cosas que no debes perderte y que ahora te nombraré, pero es que las vas a ver paseando... 

* El ayuntamiento. 

Normalmente, si vienes desde Colmar, Kaysesberg, Ribeauvillé, etc, llegarás a la parte del ayuntamiento, o más bien, del que fue el antiguo ayuntamiento y que parece el porticón del pueblo. 

* El Rascacielos ( Le gratte-ciel ). 

Es una casa amarilla que os llamará mucho la atención porque es muy alta ( mide 25 metros de altura y tiene 5 pisos ), tanto que es una de las casas con entramado de madera más altas de toda Alsacia. 

Su color amarillo también la hace muy vistosa. 

* Plaza de las tres iglesias. 

Es una plaza muy cercana al cementerio y que tiene en ella 3 iglesias diferentes. 

- La iglesia parroquial de Santa Margarita ( ahora protestante ). 

- La iglesia Notre-Dame, que era una iglesia para peregrinos y que ahora es una casa parroquial. 

- La Iglesia de Saint-Erard, que hace muchos años se convirtió en un colegio. 

* La fuente del Sinne ( Fontaine de la Sinne ).

Esta fuente fue muy importante durante el siglo XVI ya que los habitantes del pueblo la utilizaban para medir las barricas de los vinos que producían. 

Está custodiada por un león heráldico, es decir, que protege dos escudos. Por un lado, el de los señores Horburg ( una de las familias que poseía un palacete en este lugar ) y por el otro, el escudo de armas de la población, que consta de una estrella y tres cornamentas de ciervo . 

* El Dolder. 

Lo más emblemático de la población, sin duda alguna.
Sus 25 metros de altura y sus colores, junto con el entramado medieval de madera hacen que se divise desde lejos, la hacen muy visible. 

Era el edificio que más funciones tenía ya que servía como campanario, torre de vigilancia y puerta de la zona superior de la ciudad. 

* Patios

Si os gustan los patios, no os podéis perder estos tres: 

- Patio de los nobles de Berckheim. 

- Patio de la abadía de Autrey, también conocido como Adrihofhof. 

- Patio de Strasburgo, conocido como Strassburgerhof. 

* Torre judicial.

Aquí llamada Tour des Voleurs ( de los ladrones ), es una torre como muchas otras que veremos en las diferentes poblaciones alsacianas y que normalmente servía como sede judicial y zona de reclusión de delincuentes, normalmente con alguna que otra sala de tortura. 

* Fortificaciones y murallas. 

Riquewihr tiene dos murallas, una construida en el s. XIII y la otra en el XVI. 
Junto a la primera, veréis edificios muy grandes y  muy austeros en cuanto a decoración exterior. Son fortificaciones que servían para alojar a los militares y donde se guardaban las armas de defensa, etc. 

* Tienda de Käthe Wohlfart. 

Famosísima y reconocidísima tienda a nivel mundial de decoración navideña. 
Muchas veces hay que hacer cola para entrar pero vale la pena porque por dentro es una casa de madera que vas recorriendo y que está repleta de cosas navideñas ( decoración para el árbol, belenes, mantelerías, etc ) aunque sus precios son bastante altos. 

Podéis ver su tienda on line: ver tienda. 

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Lo mejor, llegar a la oficina de turismo y pedir un folleto de información ( los hay en casi todos los idiomas ), ir paseando por las calles de la población y deleitarse con todo lo que se ve y con los aromas, pues hay muchos puestos ambulantes de comida ( y vino caliente en invierno ), restaurantes y pastelerías. 

Si lo que queréis es comer, como os he dicho antes, no tendréis problema, porque hay restaurantes a cada paso que dais o si hay mercadillo navideño, allí encontraréis muchos puestecitos de comida tradicional. 

Y una cosa muy importante es que hay dos zonas de baños públicos, aunque, dependiendo de la hora, quizá no estén muy limpios pero si lleváis kleenex o toallitas, solucionado.