Durante el verano, el mayor ha leído bastantes libros y entre ellos, uno que Boolino le envió para que disfrutara de historias del mar: Lili, Leto y el Diablo del Mar.
Un libro de 110 páginas que la verdad es que le ha costado leer, no ha acabado de engancharse a la historia y se le ha hecho bastante pesado.
Como solemos decir en casa, hay libros con los que llegas a conectar pero hay otros que se te " hacen bola" y cuesta mucho tragarlos y este ha sido el caso.
Según palabras del mayor, es un libro lento y que no tiene ese suspense que te lleva a leer una página tras otra porque necesitas saber más.
Quizá sólo le pase a él y a otros peques les guste pero en casa no ha sido así.